Aquí estas exploraciones
Apariencia y realidad
Naturaleza y arte ...John Berger
.... como un fotógrafo, congela con su escritura instantáneas efímeras de la existencia; sin embargo,
hay cosas que no se pueden fotografiar
y, entonces,
va más allá y dibuja formas que activan la memoria, vivifican el pasado y lo hacen perdurar en el presente,
porque el pasado es uno de los átomos que configuran el presente: el pasado es presente, está aquí.
. . Vivir con
los ojos estremecedoramente abiertos. Utilizar, hasta sus últimas
consecuencias, el sentido de la vista 
Estimadisimos mañana tendremos un encuentro en el taller donde socializaremos los distintos descubrimientos
en todos sus formatos maquetas dibujos textos....
Stella
Para el niño, ansioso de mapas y estampas,
ResponderBorrarel Universo es igual a su apetito inmenso.
¡Ah, cuán vasto el mundo a la luz de las lámparas!
¡y cuán pequeño a la luz de los recuerdos!
Así, un día nos vamos, con ideas entusiastas
y el corazón henchido de rencor y pesares,
vamo siguiendo el ritmo de las olas
meciendo muestra infinitud en lo infinito de los mares:
unos, felices por dejar una patria infame; otros,
por huir de sus cunas horrorosas.
Para no verse convertidos en animales, se embriagan
con espacio y luz y cielos abrasados.
Pero los verdaderos viajeros son aquellos que se van
por irse; seres de corazón ligero, parecidos a los globos,
y que jamás se apartan de su propia felicidad,
y sin saber por qué, siempre dicen : ¡Adelante!
Siempre imitamos, ¡qué horror!, el baile y los brincos
del trompo y de la pelota; y hasta en el sueño
la Curiosidad nos atormenta y nos hecha a rodar
como un Angel cuya crueldad azotara a los soles.
¡Y ahí es donde el hombre, con esperanza infatigable,
tras el ansiado descanso va en la loca carrera!
El alma es un velero en busca de su Icaria;
y en la cubierta óyese al mando: <<¡Abre los ojos, vigía!>>
Cada islote que el vigía va señalado
es un Eldorado por el Destino prometido;
la Imaginación, que ya preparo su orgía,
tn sólo ve un arrecife en la claridad mañanera.
¡Sorprendentes viajes! ¡Cuántas nobles historias
leemos en vuestros ojos, tan hondos como el mar!
Mostradnos los estuches de vuestra rica memoria, esas joyas maravillosas, hechas de astros y cielos.
Decidlo: ¿qué habéis visto?
Las ciudades más ricas, los paisajes más hermosos,
nunca poseyeron el incentivo misterioso
de cuanto inventa el azar con las nubes,
¡y el ansia seguía acuciándonos!
¿Seguirás creciendo, árbol grande y más vivaz
que un ciprés? -No obstante, cuidadosamente recogimos unos croquis para vuestro álbum voraz,
¿hermanos que juzgáis hermoso lo lejano!
Vimos y admiramos ídolos con trompa;
también tronos constelados de joyas luminosas;
y palacios muy adornados cuya pompa mágica
sería, para vuestros banqueros, ensueño ruinoso;
vimos vestiduras que a los ojos halagaban;
tambien a mujeres con dientes y uñas pintados,
y a prestidigitadores a quienes las serpientes acariciaban.>>
¿Y qué más, qué más visteis?
<<¡Oh mentes infantiles!>>
Nunca olvidaremos el móvil principal del mundo, y
por doquiera vimos, sin haberlo siquiera buscado,
desde arriba abajo de la escala fatal,
el espectaculo aburrido del pecado eterno:
la mujer, esclava vil, orgullosa y estúída,
el hombre, tirano, voraz, lúbrico, duro y vicioso,
el verdugo que goza, el mártir que solloza;
la sangre que adorna y perfuma fiestas;
el déspota nervioso por el veneno del Poder;
y el pueblo aficionado al látigo que le sojuzga;
¡Amargo saber es el que se aprende en los viajes!
El universo, tan monótono y chico hoy y ayer,
mañana y siempre, nos ofrece propia imagen:
¡oasis de horror en un desierto de hastío!
¿Hay que huir? ¿O quedarse? Si puedes, quédate; y si no, márchate. Los hombres corren o se ocultan para librarse del enemigo acechante y funesto:
¡el Tiempo! Hay quienes corren sin parar.
Aquí es donde se recoge la fruta
maravillosa que vuestro corazón ansía;
acudid y embriagaros con la dulzura intensa
de este atardecer definitivamente eterno>>
Aunque el cielo y el mar son tan negros como la tinta,
¡ya sabes que nuestra alma es resplandeciente!
¡ya sabes que nuestra alma posee mil rayos!
¡Abrasados por su fuego ansiamos alcanzar
el abismo, Infierno o Cielo, poco importa,
Sumirnos en lo Desconocido y hallar la novedad!
"El viaje". Las flores del mal, de Charles Baudelaire.
¨El espacio de un edificio debe poder leerse como una armonía de espacios iluminados.¨ L. Kahn
ResponderBorrarmuy largo no lei un carajo!
ResponderBorrarlargo, pero barbaro.
ResponderBorrarmi concentración no me permite leer todo eso, hacete un dibujo mejor...
ResponderBorrarmieeerda, tan concentrado estas??
ResponderBorrarentendiste cualquiera, significa que no puedo mantener la concentracion para leer tremendo testamento!!!!
ResponderBorrarmandalo en pdf
ResponderBorrargrosso Matias
ResponderBorrar"Y ahí es donde el hombre, con esperanza infatigable,
ResponderBorrartras el ansiado descanso va en la loca carrera"
estos somos nosotros... será que Baudelaire cursó una "carrera" en la Fadu? jeje.
Existe tal descanso ansiado? por suerte tenemos la esperanza infatigable que si no...