martes, septiembre 06, 2011

De Lunlunta a Mangalia.

Estimados alumnos:

En algunos coments del blog abierto que nos reúne y convoca , del que ustedes son un curso muy participativo, y en los dichos de alumnos de otras cátedras durante la sorprendente mostración del primer cuatrimestre he notado que existe una especie de confusión en relación a los alcances de nuestras maneras pedagógicas en el orden de concretar trabajos reales.

Básicamente parecería que en el alumnado no perteneciente a la cátedra e incluso en alguno de ustedes persisten ciertas dudas en lo que se refiere a la posibilidad de llegar al campo de la obra construída y a la adecuada respuesta al uso ..lo llaman funcionalidad.

Incluso hay quienes aseveran que la cátedra deja de lado este aspecto funcional y que no tienen cuenta la estructura.

Y van por mas diciendo que parecemos una cátedra de Morfología y que que hay que tener en cuenta que no es justo que estemos en igualdad de condiciones que “ello” para emitir título.

Eso es absolutamente errado , ocurre que entendemos función y estructura de una manera diferente a la de los métodos aditivos de composición arquitectónica vigentes en muchas cátedra de nuestra facultad .

“ Primero las plantas, luego los cortes, mas tarde las vistas y finalmente la prolija maqueta de entrega, previamente se habrá elegido un modelo tipológico válido para el uso propuesto y se procederá a plicar un sistema constructivo compatibel , si es modular tanto mejor “.

Esta incomprensión de nuestras maneras pedagógicas ya la hemo vivido con el arquitecto Mario Gonzalez en la facultad por muchos años , incluso con una virulencia impresionante en la década del 80 cuando hablar de lo formal , esto es de la forma en la facultad era considerado un pecado mortal.

Nuestra concepción de la arquitectura como una ciencia inexacta maravillosamente compleja y contradictoria

Nuestra no adscripción a métodos reduccionistas falsamente eficientes en términos de aprendizaje

Nuestra creencia en las maneras personales subjetivas propias de las bellas artes ( pintura escultura poesía música) a las que consideramos Hermanas irrenunciables de la arquitectura .

Nuestra idea de que el alumno es el principal autor de su trabajo y que el mismo no debe ser una mera aplicación de modelos preconcebidos.

Nuestra concepción de la estructura según la cual no alcanza con la visión reductiva ingenieril de simple soporte del edificio sino con una comprensión mas abarcante e integradora como la que “estructura y organiza el espacio” y por ende se convierte en elemento clave en la gestación del lenguaje tectónico .

Nuestra interpretación de lo funcional ( alejada de los gráficos y los globitos interrelacionados) entendida como la plenificación del uso vital, tamizado y trabajado a fondo merced a la profunda investigación del programa devenido así de programa de necesidades en programa arquitectural

La máxima “Nuestro taller es un taller de búsquedas y no de certezas , la verdad no es un dogma predigerido sino una permanente construcción contextual”

Nos han asegurado un espacio en el patíbulo acusados livianamente de formalistas.

No obstante no sólo nuestras cabezas siguen apoyadas en los hombros sino que en estos últimos años hemos sentido (jury y concursos mediante) que muchos de nuestros colegas docentes nos empiezan a entender e incluso hemos asistido sorprendidos a la obtención por parte de nuestros alumnos de importantes premios nacionales e internacionales .

Que en este marco tan positivo de consolidación de nuestro quehacer recrudezca la tensión formal-funcional que imaginábamos ya esclarecida. Que duden incluso de nuestra capacidad de “obrar “ nos molesta profundamente.

No pretendemos imponer a nadie nada, pero tampoco aceptamos que pretendan imponernos a nosotros nada.

Por todos estos motivos y para ahuyentar falsos fantasmas de imposibilidad de concreción a través de nuestras maneras me ha parecido pertinente ir al grano y mostarles las obras y proyectos que he realizado en estos últimos ocho años desde que estoy afincado profesionalmente en Mendoza.

Me ha parecido sugestivo titularla parafraseando aquella película de Liniers a Estambul

De Lunlunta a Mangalia

Muchas de Las situaciones similares a las que ustedes enfrentan me han surgido en el trabajo , prefiero en vez de explicitarlas teóricamente invitarlos a esta mostración en la esperanza que puedan ustedes tener una mirada extensiva e integradora tratando de descubrir aquellas consideraciones actitudinales que nosotros tratamos de sembrar en ustedes.

Y atento que pongo el acento en la actitud ya que desde ningún punto de vista estoy hablando de la resolución en si que siempre debe ser propia, contextual en cada caso, en cada lugar , en cada tema .

El pasado lunes pude mostarles la mitad de la charla el próximo lunes a las 21 hs( recomiendo puntualidad) la estaré completando .

Salud

Marcelo

9 comentarios:

Anónimo dijo...

Dejo constancia de mi adhesión fiel a estos conceptos y filosofía de trabajo.
De obrar, presente a esta actitud, para forjar un futuro sensible a su historia y honrando la gracia significante del Hacer.

Este pensamiento me ha dado lugar y pertenencia como alumno y ahora como docente.

Desde mi humilde opinión, transcribo lo que interpreto como "Manifiesto"

"Nuestra concepción de la arquitectura como una ciencia inexacta maravillosamente compleja y contradictoria

Nuestra no adscripción a métodos reduccionistas falsamente eficientes en términos de aprendizaje

Nuestra creencia en las maneras personales subjetivas propias de las bellas artes ( pintura escultura poesía música) a las que consideramos Hermanas irrenunciables de la arquitectura .

Nuestra idea de que el alumno es el principal autor de su trabajo y que el mismo no debe ser una mera aplicación de modelos preconcebidos.

Nuestra concepción de la estructura según la cual no alcanza con la visión reductiva ingenieril de simple soporte del edificio sino con una comprensión mas abarcante e integradora como la que “estructura y organiza el espacio” y por ende se convierte en elemento clave en la gestación del lenguaje tectónico .

Nuestra interpretación de lo funcional ( alejada de los gráficos y los globitos interrelacionados) entendida como la plenificación del uso vital, tamizado y trabajado a fondo merced a la profunda investigación del programa devenido así de programa de necesidades en programa arquitectural

La máxima “Nuestro taller es un taller de búsquedas y no de certezas , la verdad no es un dogma predigerido sino una permanente construcción contextual”

Cesar

Rocío. dijo...

...Y tantos alumnos comulgamos con esta manera de obrar, celebramos y sostenemos año tras año el proceder de esta cátedra, convencidos y felices de haber dado con el taller en el que podemos apropiarnos y empoderarnos de nuestro trabajo. Donde también tendrán un lugar los aspectos intuitivos y sensibles de nuestro temple, y en el que guiarán nuestro tranco personas apasionadas por HACER arquitectura. Aunque implique tomar el camino largo y lleno de dudas, dedicandole la vida.
Aguante la embestida "normalizadora" si sirve de excusa para anunciar una vez más, precisar y profundizar la intención del gesto!!!
Salud.

Tamara dijo...

Marcelo, te aplaudo de pie.
Gracias por defender la libertad de expresión, la de pensamiento, acción y reacción.
Somos libres de hacer arquitectura de la manera en que mejor la sintamos, ¿por qué aceptar y doblegarse ante métodos tan ortodoxos que nos proponen las cátedras hermanas?
SOMOS LAS OVEJAS NEGRAS DE LA ARQUITECTURA, Y A MUCHA HONRA!!

Anónimo dijo...

"El mediocre no inventa nada, no crea, no empuja, no rompe, no engendra; pero, en cambio, custodia celosamente la armazón de automatismos y prejuicios y dogmas acumulados durante siglos, defendiendo ese capital común contra la asechanza de los <>."

Anónimo dijo...

"inadaptables"

Anónimo dijo...

igual, me parece que en el edifico de la aceituna la metáfora se fue al carajo..

Marcelo dijo...

En verdad y mas allá de la aceituna el espacio interior es muy interesante y medido , al fin se trata de un parabólico de sección variable y como la estructura sería de madera laminada , la fábrica mas grande está acá en Mendoza, me parece que todo cobra ribetes bastante posibles.
Es bueno que sepan que uno no anda por ahi proclamando la metáfora, el hecho de que uno la confiese entre colegas y alumnos es otra cosa pero a mi nadie me quita la satisfaccion cuando alguien que visita el edificio en un momento del recorrido dice "uy mirá parece una aceituna".

Anónimo dijo...

mas que aceituna testiculo de hulk, por el tamaño, vio.

Ignacio Luis De Palma dijo...

Felicito el debate y los comentarios con nombre y no anonimos como en la mayoria de los otros blogs. Saludos a todos y felicitaciones a Marcelo por el aguante frente a cualquier viento.